La nueva pandemia del coronavirus no solo trajo dudas e incertidumbres: también generó pérdidas financieras y emocionales. El aislamiento ha llevado a millones de personas a encerrarse y alimentarse del miedo en relación al futuro.
La pérdida de empleos e incluso el hecho de verse afectado por Covid-19 o ver a alguien cercano a ellos perder la vida debido a la enfermedad son factores que contribuyeron al empeoramiento de esta situación. Precisamente para ayudar a quienes se han enfrentado a todo este contexto, la Iglesia Adventista creó el proyecto Oído Amigo, que ofrece apoyo psicológico gratuito a miles de personas en ocho países sudamericanos.
En esta entrevista, la coordinadora de la iniciativa, Marli Peyerl, explica cómo los más de 800 profesionales están brindando alivio y esperanza a las más de 26,000 personas que ya han servido. Para más informaciones, visite adventistas.org ? -